viernes, 8 de febrero de 2008

Voces de hoy/Agustín Labrada/CUBA


Agustín Labrada Aguilera (Holguín, 1964). Estudió literatura en el Instituto Superior Pedagógico “Enrique José Varona” de Cuba y ciencias de la comunicación en la Universidad Interamericana para el Desarrollo de México. Desde 1992 reside en México, donde coordina el Premio Internacional de Poesía “Nicolás Guillén”, dirige la revista cultural Río Hondo, y realiza el programa radiofónico Una puerta al mar. Es autor de los poemarios La soledad se hizo relámpago (1987), Viajero del asombro (1991, 1995 y 1997) y La vasta lejanía (2000 y 2005); las selecciones antológicas de poesía cubana: Cuatro muchachas violadas por los ángeles (1989) y Jugando a juegos prohibidos (1992); y los libros de periodismo cultural Palabra de la frontera (1995), Más se perdió en la guerra (2000) y Un paseo por el Paraíso (2006). Poemas suyos figuran en más de 30 antologías publicadas en Europa, América Latina y Estados Unidos; así como en los discos Un lugar para la poesía (1986, 2006), Guerra y literatura del siglo xx (2003) y Los ángeles también cantan (2006). Ha ofrecido lecturas literarias en espacios culturales de Cuba, México, Nicaragua, Bulgaria, España y Francia. Textos periodísticos y literarios suyos aparecen en publicaciones del mundo.

SIN TU VOZ EN GRANADA


Tantos colores
como un denso domingo,
sobre el lago
y las tejas cansadas,
recordaron tu voz.

¿Cuántos islotes
vimos a la deriva,
como ballenas,
lejos de tierra firme
con lastre en sus baladas?

Así se eclipsan
en nebulosos giros
tantas mujeres,
sin que jamás anuden
los volcanes deseados.

ARRECIFE


A Ramón Iván Suárez

El desafío:
huir de este arrecife.
Día cerrado
sin ninguna escalera
ni una dormida fuente.

Van mis mensajes
con sus figuraciones
tras los pelícanos,
maldición que retorna
expandiendo la escarcha.

¿Cómo vencer
el anclado tsunami,
sobre las crestas
de vigas enfiladas.
con este violonchelo?

Si aún respiro
por las casuarinas,
si aún añoro
lo que lloverá,
no han muerto mis remeros.

A contraluz,
al fin la mano amiga
y en su promesa
flotar agradecido
hasta otro infierno.

No hay comentarios: