domingo, 18 de mayo de 2008

El Pescador

Pintura de Avendaño Larrarte

Del libro: "Entre cuentos y Poesías"/2007

El Pescador

Detrás de la puerta estaba colgada el alma. Se mecía en un viejo perchero
oxidado por la última ola de mar que había respirado. El no sabia de flores
y poesías, ni de canciones de amor que registran el llanto. Pero sabía de
mar, de sol y de arena. De barcos gigantes, y de enormes redes que
enjaulaba a los peces.
A ella le entregó el más grande. Tan grande como un
tiburón. Ese fue su primer y único regalo. Después regaló amor, pero amor
del puro, de ese que se entrega con los ojos y se talla con las manos.
Lloró su partida la noche del martes y enjuagó sus ojos con agua del mar.
Confundió sus sales de dolor con los granos de la arena, y dejó colgada su
alma detrás de aquella puerta.

Dicen que fue en busca de sus redes.

5 comentarios:

©Claudia Isabel dijo...

Que bello poema!!!
Un gusto enorme conocer tu espacio poético.
Un abrazo desde Buenos Aires
www.laperladejanis.blogspot.com

M@R dijo...

muy bellas letras,,,

abrazos,,,

mercedes saenz dijo...

Pedro: Esta ternura de poema me encantó. Es tal vez por esas costas del lugar dónde naciste. Tu manejo del mar y su enorme universo me parece muy bueno. Un abrazo. Merci

mercedes saenz dijo...

Pedro: Esta ternura de poema me encantó. Es tal vez por esas costas del lugar dónde naciste. Tu manejo del mar y su enorme universo me parece muy bueno. Un abrazo. Merci

Migdalia B. Mansilla R. dijo...

¡Hermoso! Recrea esa imagen y ser del pescador, paisaje de mil estampas, pescador que alimenta, que da vida y es espíritu.

Un placer leerte.
Besos,
migdalia