Del libro: "Entre cuentos y poesías"
María cantaba.
“…manitas sueltas…ojitos de otoño…boquita de cielos …rizitos de sol”.
Cantaba con la niña en brazos. Brazos inertes y rígidos trazando las lineas del dolor. Sobre su pecho rezaba a la niña y razgaba en su boca el tibio sudor.
María estaba absorta sobre la hierba húmeda que la lluvia estrenaba en las tardes de Agosto. Su vestido de harapos, cubría a la niña del pegajoso verano. María cantaba al cielo, buscando el sueño conciliado en su hija sin voz. Aquella niña que un dia corrió por praderas y limpió su menudo cuerpo con las aguas del mar.
Maria la extraña, Maria la llora... y aprieta en sus brazos a la muñeca rota.
4 comentarios:
buen blog interesantee
pasate por el mio
mi correo es jaimearayam@gmail.com
en caso de cualquier cosa
Bello, Pedro, con el sentimiento siempre a flor de piel.
Gabriela.
Que bella sensibilidad. Que buena escritura. Un abrazo,
Silvia Loustau
Gracias Jaime, gaby y silvia por detenerse a la lectura.
Un abrazo
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